viernes, 11 de diciembre de 2009

LA NOCHE MÁS ESPERADA - segunda parte


La noche más esperada – Segunda Parte


El hostal donde nos cobijamos Ana y yo no es el Ritz pero está limpio.
El edificio es viejo pero está situado justo en la trasera del Teatro lo que es todo un lujo.
Aparcamos el coche junto a la Policía, en el parque Castelar, si no me equivoco.
Estábamos cansados y a Ana empezaba a molestarle la espalda, así que nos echamos un rato.
Dormí una media hora pero el resto del tiempo mi mente no paró.
Miguel me ha dicho:
-Si hay alguien que va a disfrutar como un enano … ese eres tú.
No tengo la menor duda.
Si hay algo que yo ame, después de mis seres queridos, eso es la música y la literatura. No entiendo la vida sin ellas.
A eso de las 8 de la tarde y después de una reparadora ducha, bajamos al Teatro.
En la puerta está el cartel anunciador del evento y en la taquilla el “Localidades agotadas” brilla reflejándose en los dulces ojos de mi “novia” que sonríe como una chiquilla traviesa, lo que nunca dejará de ser ante mis ojos.
Nos hacemos unas fotos junto al cártel y en ese momento aparecen las primeras fans en busca de entradas de reventa pues no pudieron adquirirlas antes.
Ahí vienen Miguel y Nani a nuestro encuentro.
El tiene que pasar ya a vestuarios pero no lo hace antes de departir unas cariñosas palabras con la taquillera. Siempre tiene la palabra amable justa y el buen deseo sincero y espontáneo, dichosa la rama que al tronco sale.
Entramos en la cafetería La Marina (si no me equivoco de nuevo) junto al Teatro para tomarnos una cerveza antes del concierto que empieza a las 9.
Allí se nos unen María José, Mathias (no se si lo escribo bien) y María , la fan más joven y marchosa con sus tres años de experiencia vital.
Allí vemos por primera vez a las alborotadoras y entrañables “brigadas amarillas”, los amigos conileños (principalmente) vestidos como auténticos y genuinos seguidores cadistas portando su atuendo y atrezzo del verdadero submarino amarillo.
Realmente son momentos extraordinarios.
Ya vamos a entrar , ya pasamos al interior del templo del arte pacense.
Ya buscamos nuestros asientos en segunda fila.
Allí abrazo y saludo a viejos y nuevos amigos , sobre todo a la abuela Maruja, a la que tantas ganas tenía de ver.
Ya se apagan las luces y se oyen unas voces inesperadas atrás a la derecha.
En el pasillo central está a punto de ocurrir algo.


----CONTINUARA----

2 comentarios:

  1. Qué pasará, que pasará... (8)
    Las fans de 3 años siempre son las mejores. Creceran con su recuerdo tatuado en el pecho =)

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