MANUEL

Mi tio abuelo Manuel Bolaños Díaz


MANUEL

Mi abuela me hablaba de sus hermanos cuando yo era un niño.
Me señalaba la vieja foto que había junto al marco de la puerta de entrada de su humilde casa y me decía “Ese es mi hermano Manuel…murió por culpa de la Guerra de Franco (aquí le ponía un adjetivo bastante sonoro) y de el chivato de ….( aquí no voy a citar el nombre pues ya ese individuo murió y sus descendientes no son responsables de aquel hecho)”.
Y yo miraba aquél rostro bonachón y noble… y entendía a mi abuela y sus lágrimas pero desconocía todo lo demás.
Voy a contar la historia de Manuel (lo que se de ella) tal como la conozco.
Si alguien difiere de ella puede que la conozca mejor que yo… pero a grandes trazos es la historia de un puertorrealeño, de un gaditano, de uno de los 7000 españoles que murieron lejos de su tierra de un modo injusto e ignominioso.
Manuel nació el 5 de Mayo de 1912 en Puerto Real (Cádiz).Cuando se marchó al exilio contaba con 24 años de edad. Toda una vida por delante.
Trabajaba como muchos de sus coetáneos en la industria naval, en la Bazán en San Fernando.
Contaban los que lo conocieron que era un hombre jovial y dicharachero, con un encanto especial y una sonrisa pícara para todos.
En lo que no se pusieron de acuerdo nunca mis mayores es si era republicano, comunista o solo un buen hombre en la lista de algún cretino vilipendiador.
Eso para mi, es indiferente.
Tanto si era republicano como si no, el caso es que un día aciago de 1936 fue denunciado por Alguien y tachado de comunista en una zona en poder falangista.
Antes de que pudieran echarle el guante, Manuel, huyó de su domicilio con unas pocas vituallas y se dirigió a Medina Sidonia. Más concretamente a una zona de campo conocida como los Ardales.
Allí, en casa de unos tíos suyos se ocultó en el interior de un pozo de riego durante varios días.
Hasta que alguien vino a advertirle que había sido descubierto a través de un llamémosle “informador”.
No le quedó otra alternativa que huir hacia el Norte y cruzar la frontera. Aquí vuelve a haber confusión pues no se sabe si cruzó en ese mismo año o por el contrario se quedó en Cataluña luchando en el bando republicano hasta la disolución de este al final de la Guerra Civil en el 39.
Fuera como fuera, lo que si se sabe es que atravesó el paso a Francia y que probablemente estuvo trabajando (como otros centenares de españoles) en el reforzamiento de las defensas francesas tras el avance nazi.
Tras la llegada del ejercito alemán es detenido e ingresa como preso de guerra en el Stalag (Campo de prisioneros de guerra) conocido como IX-A (Ziegenheim).
Al desentenderse las autoridades galas (a pesar de haber trabajado en las defensas de sus ciudades) y las españolas (según Franco, cuando Hitler le pregunta que que hace con los presos españoles…este responde “Fuera de España…no hay españoles”) … los presos de guerra se convierten en presos de carácter antisocial (que me expliquen que quiere decir esto!!!!) y son deportados al campo de III Categoría conocido con el nombre de Mauthausen.





Entrada del campo de Mauthausen

Allí fue a parar Manuel el 13 de agosto de 1940 juntos con algunos compañeros y paulatinamente van llegando más y más españoles al campo de concentración (luego llamado de Exterminio).Su número es el 3740.
Allí son usados como mano de obra en la construcción de edificios anexos al campo…entre ellos el de Gusen.


Campo anexo de Gusen

El modo de exterminio fundamental es la muerte por agotamiento (cuando no son baleados, gaseados o muertos por ataque de perros).
El 17 de febrero de 1941 es deportado al campo anexo de Gusen ( número 10331) donde estaría hasta el final de sus días.
Allí muere el 29 de diciembre de 1941.
De los horrores que tuvo que soportar durante este periodo de tiempo pueden dar datos aquellos que fueron liberados el 5 de mayo de 1945 con la llegada de los aliados.



Escalera llamada de Los Gigantes.186 peldaños que los pesos debían subir cargados con piedras que pesaban entre 20 y 40 kilos hasta la extenuación.

Años después llega a casa de mi bisabuela una carta confirmando su fallecimiento (sin mas datos) y la posibilidad de obtener una compensación económica…como si el dinero pudiera pagar la ignominia.
Mi abuela hasta el final de sus días sostuvo que lo único que deseaba era poder enterrar a su hermano…ella desconocía los crematorios de los campos de exterminio. Supongo que los restos mortales de Manuel se fusionaron con los de otros muchos dando lugar a las cenizas que debieron cubrir el “campo de los españoles”.
Esta es la historia (lo que sé de ella) de mi tío abuelo Manuel Bolaños Díaz.
Y este es mi homenaje en el año que descubro que fue de él. Pero sé (por que me lo han dicho) que el ahora está bien.

Esta es la canción que le escribí:

MANUEL


Manuel trabajaba en los barcos
Y tenía en los labios sabor a revolución
Algún otro de negros presagios
Miraba sus sueños lejanos con perfidia explosión

La envidia que es muy mala amiga
Se convierte falaz en palabras arteras
Y Manuel debe huir de la intriga
Y ocultar su pasión en un pozo de espera.

La misma lengua delatora
Dispara los pasos hacia Los Ardales
De aquellos que quieren su muerte
Y quebrar corazones con balas mortales

La suerte a veces esquiva
Hace que Manuel sepa de la busca
Y saltando alambradas furtivas
Huye hacia el norte, tierra de penumbras.

En Francia lo acogen los suyos
Mismos ideales, historias similares
Pero su destino es oscuro
En tiempos convulsos de sones militares

Huyó del yugo y de las flechas
De la nacional guerra entre hermanos
Pero llegan esvásticas lesas
Que van por Europa cercenando manos.

Y en Gusen, campo de exterminio
Acaban sus huesos a los veintipocos
No tiene tiempo tan siquiera
Para despedirse de este mundo loco.

Y han pasado más de 60 años
Y no queda nadie de su tiempo
Los suyos los que aún le esperamos
No sabemos donde esta su lecho.

Aunque si su espíritu
Que esta aquí con nosotros.


Un abrazo, Manuel, siempre estarás aquí.

Nota:La canción está en el reproductor