ENTRE NUBES Y EL CALOR DE EL GUITARRÓN DE SAN PEDRO

Estaba deseando que llegara el día.
Había muchos motivos para festejar que la siguiente presentación de “Desde mi consciencia” fuera en Jerez de la Frontera.
Allí, nada más y nada menos que en la Fundación Caballero Bonald, tuve la fortuna de recomenzar mi andadura por el mundo de las letras y la música...Después de casi 20 años alejado de los escenarios y de la mano de mi buen amigo Juan Manuel Alcedo, allí en 2009, volví a los espacios musicales.
Por otro lado siempre he sido muy bien acogido en esta ciudad donde tengo muy buenos y estimados amigos...y esa es otra de las razones por las que estaba deseando actuar en Jerez y más aún en uno de los tabancos más hermosos y con más solera, “El Guitarrón de San Pedro”.
Gracias a las desinteresadas gestiones de mi querida amiga Millye Sanivi que coordinó la organización del evento con Mireia, la propietaria del Guitarrón, todo era posible.
El día, lluvioso, tormentoso, como lo son lo0s típicos y naturales días de Otoño, parecía que tal vez iba a darme una tregua a la hora de partir hacia Jerez y,aunque no las tenía todas conmigo, el optimismo y la certeza que me inundan en estas ocasiones me hacían presagiar lo mejor de lo mejor.
Además iba a tener un maestro de ceremonias de lujo, mi hermanory Fernando Polavieja.
El trayecto fue algo accidentado ya que además de la pertinaz lluvia, el GPS que habíamos preparado perdió la conexión y nos dejó en medio de la noche en las afueras de Jerez y sin modo de saber como llegar...Por suerte, 10 minutos después volvía la conexión y a ser configurado por Ana y al fin pudimos continuar el camino.
Aparcamos a unos 5 minutos del local y así tomamos de nuevo los bártulos y el paraguas y nos encaminamos hacia el Guitarrón.
Cuando nos vamos acercando veo que Millye nos está esperando en la puerta. Son las 20,30.
En el interior poca gente, Millye con su amiga Agueda y un par de personas más  que no se si están allí para oírme o solo para tomar unas copas.
Pero no me preocupa. De un tiempo a esta parte he reconocido y aceptado que siempre están los que deben estar. Ni más, ni menos. Y como canto igual para uno que para mil (aunque nunca he cantado para mil...jejeje)...eso es lo que importa.
Estoy soltando los bártulos cuando reconozco la voz del que acaba  de entrar por la puerta.
Fernando Polavieja, trovador, cantor de poetas y sobre todo un hermano que canta desde el corazón. Uh placer enorme tenerlo allí, un placer fundirme con él en un abrazo sincero y vibrante.
Observo entonces con serenidad el lugar...Me gusta el espacio. Jamás había cantado en un lugar de esas características y veo que me voy a sentir cómodo...entre amigos, y en un lugar precioso.
Conozco entonces a Mireia y a su madre Lola, dos tabanqueras encantadoras...gente emprendedora y con carácter y una amabilidad digna de resaltar.
He pensado que va a ser una presentación con poca asistencia debido a que es jueves, día entre semana, y lo lluviosa y destemplada que está la noche, y me sorprende, mientras afino la guitarra y me preparo, ver como va llegando gente....
Agrdezco la presencia de gente bonita como Fernando y Millye, así como de las poetas Dolors Alberola y Carmen Saiz que llega con su compañero , mi paisano, Ismael Calvo, de Patrizio Pérez Pacheco que llegó un poco después y de mucha gente que no esperaba.
El tabanco,para mi sorpresa, acaba llenándose por completo...y eso siempre es hermoso...ver rostros expectantes y miradas amables...
Y es Fernando quién toma la palabra y me hace una de las más hermosas presentaciones que he recibido donde lo que más me llega es oírle llamarme “hermanory”, una expresión hermosa y sincera.
Con estas sensaciones , un leve temblor de manos y un  nudo en la garganta que pronto se disipa, comienzo a cantar...
Varios temas del disco...”La Próxima vez”, “Libre Sos”, “Juan Buen Pagador”, “Malala”, “Muro de vergüenza” y “Rebelión por la libertad”.
Cada nota fluye,no de un modo automático y reconocido, sino con la cadencia y serenidad que da saber que sale del alma, con la honestidad de permitirme saber quién soy y lo que canto, sin otra pretensión que compartirme...solo eso.
Y es fácil. Cada vez lo es más. Porque disfruto cantando, sin pretensiones, sin expectativas...
Después de cantar los temas de “Desde mi consciencia”, comparto algunas canciones nuevas...la primera de ellas un canto homenaje a mi querido amigo Fernando Polavieja...Esta canción tiene su historia...
Cuando Miguel Ángel Rincón presenta en Puerto Real su poemario “La Máquina Quimérica” cuenta con la colaboración de tres cantautores , Luis de Manuela, el propio Fernando y el que suscribe.
Este día sirvió,entre otras cosas, para que se conocieran Fernando y Juan Manuel Alcedo...y una vez más mi primo Juan Manuel lo bordó pues al día siguiente me manda esta letra, de la que trascribo algunos versos, que luego musiqué y canté...

 JUGLAR Y TROVADOR          ( A Fernando Polavieja)

Se oye la voz en la calle
del juglar y trovador,
con maneras de señor,
montando su pasacalle.
Ya nadie pierde detalle ….

Cachivache, violín, vela,
regadera que nos muestra
su camino: la siniestra.
De poetas centinela,
de lo comercial recela.
Cachivache, violín, vela. “

Todo un abrazo a mi hermanory Fernando.
Después canto dos de mis últimas composiciones, “Tengo una balada en la cabeza” y  “Aunque se te olvide a veces”. , y para cerrar, una vez más, “Cuando el alma habla”.
El aplauso final me llega al corazón ...y en cuanto a la venta de discos (de esto no se suele hablar) estuvo bastante bien sobre todo viendo como marchan los tiempos en la música.
Y luego, un rato increíble con mis amigos, pudiendo oír cantar entre bambalinas a Millye Sanivi...chica...tu arte y tu voz,...eso no puede quedar entre bambalinas ...permítete fluir, pierde el miedo y regálanos con tu hermoso canto.
Después el merecido descanso...las fotos...y un vino y unas tapas entre amigos...lo mejor.
Y cuando quedábamos cuatro gatos, Fernando tomó la guitarra y nos deleitó con su canto y ese sutil rasgueo que le caracteriza...
Y así, en un festivo y relajado mano a mano, cantamos alternativamente algunas canciones y compartimos anécdotas e historias personales que quedan para nosotros...en ese cálido rincón del corazón reservado a la amistad sincera...
¿Hay mejor modo de festejar la música y el amor por ella que este?