Cala de Conil de la Frontera |
Y comienzo el año 2013 con un par de ideas en mente…grabar
un disco de blues (o al menos con inspiración bluesera) y otro de música celta
(ídem)…
Sobre el disco de blues, termino desistiendo…no es mi estilo
hacer un disco que se mueva en los mismos parámetros…me gusta diversificar…el
sentido “celta” es otra cosa…me permitirá mas variaciones…y además…yo soy celta
de corazón…así que este si lo voy a hacer….
Lo que si sigo manteniendo es el titulo de mi vigésimo
noveno álbum de canciones propias…se llamará “Despierta el blues”, como una de
sus canciones.
Y el primer tema es un tema que hace mucho tiempo que quiero
escribir…y va a hablar de 22 años de mi vida…años que me han curtido sin duda,
años felices a orillas del mar hermoso de los Atlánticos…22 años viendo crecer
a mis hijas en un entorno marino, 22 años de amigos, de calles, de Sal y Arena.
Así que esta canción, que escribí un atardecer de enero
sentado al teclado (aunque finalmente decidí construirlo con guitarra, como
siempre) en mi casa, en Puerto Real, habla de otra población y de otros días
que guardo en mi corazón…habla de Conil de la Frontera, de la “vieja ballena”
que después de años varada en la arena volvió a surcar los mares…de cómo
crecieron tres mujeres a las que amo y como creció cada día más en mi el amor
hacia ellas y el orgullo de padre y compañero…
11/01/2013 DE SAL Y
ARENA A.BARO
Pero dejó su espíritu en la arena varado
Y aunque el progreso destruyó el viejo acantilado
Permanece su esencia que emerge con el claro de luna.
El Ave María que resuena en las campanas
Del ayer se torna en mensajero
Mientras Juan Capacha acuarelas de luz pintaba
Instantes eternos en blanco y negro.
Y las aguas azules que bañan tus arenas
Me traen sones de sueños marineros
De la vieja Cybion de raíces perpetuas
De almadraba y jabega, de atún y viento.
Desde la
Torre vigía hasta los faros
Me evocan aires de sal y arena
Lejos de ser solo cantos de sirena
Degustaba yo la brisa en el brillo de unos ojos castaños
Y aprendía con los años a ser un símil de cantor
Con la luz que me anegaba el alma
A mi tríada de amores di calor
Entre tormenta brava y mar en calma
Y me vi nadar entre jureles y bocinegros
Tiré mis redes de sueños y fantasías
Y no hubo mayor captura que la de mi empeño
Y es que a lomos de aquella Ballena errante forjé mis días.
P.D- Podéis oírla en soundclick, arriba
Quien haya paseado por Conil fuera del maremagnun estival se siente cómodo paseando por tu canción.
ResponderEliminarQuien haya tenido la suerte, como yo, de escucharte cantarla en directo, pues ya ha tenido la suerte a pares.
Un abrazo, primo.
Juan Manuel