EL NACIMIENTO DE LA IRREPETIBLE CAMPANILLA

Judith y yo , años después junto a las ruinas de Bolonia

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Y pasaron los años...Seguía en mi trabajo en Conil, apartado de la música...casi también de las letras (en esa época me limité a escribir un par de relatos cortos...no demasiado buenos en verdad) y viviendo la infancia de la pequeña Amanda, que era una niña dicharachera (a veces demasiado mayor para su edad...había pocos niños a su alrededor).

Y como no queríamos que se criara sola...queríamos que compartiera y que tuviese cerca alguien que la quisiera incondicionalmente y a la que ella quisiese del mismo modo...decidimos buscarle una hermana...Y así vino al mundo Judith...mi Campanilla (aunque a veces era mas Robin Hood que otra cosa...eso de ser princesita remilgada no iba con ella)...Desde que nació sembró nuestras vidas con el polvo mágico del país de la Fantasía...Con ella navegamos por mares bravíos de tormentas insidiosas...con ella amanecimos en un tipi en las praderas del Nuevo Mundo....

Y entonces fue la felicidad completa....No necesitaba nada más...Tenía dos hermosas hijas con las que compartir mis horas...la música y las letras de mi vida fueron ellas a partir de ese momento....Y aunque no se lo digo a menudo a las dos(y no lo hago para no avergonzarlas ya son mujeres jóvenes y que un papi se ponga “bobo” no estÁ bonito...jajaja)...ellas saben que siguen siéndolo. Que aunque su padre se haya convertido de nuevo en un viejo trotamundos musical...como mas disfruto sigue siendo en su compañía...y gracias sean dadas...aun tenemos muchos de esos ratos mágicos...

La que sigue es una canción que escribí a mi hija Judith cuando apenas contaba con unos días de vida...Habla sobre todo de la maravillosa sensación que tuve cuando la vi aparecer por fin...

JUDITH A.BARO

Y frunces el ceño y pareces pensar…

¿Qué hago aquí, es esto real?

Tus ojos brillantes que llaman al mar

Tu sonrisa tierna la brisa me da

Y tus balbuceos me suenan a Bach

Pequeño lucero, caído del cielo

Que llenas mi alma de cálida calma

Y colmas de dicha mi pecho y mi lar.

Tus pies y tus manos cual alas flotan

Y golpean el aire buscando volar

Me miras con sorna e incredulidad

Y aprietas mis dedos, me hablas sin hablar

Te tomo en mis brazos y empiezo a temblar

Mis ojos se cubren de lágrimas dulces

Tu espíritu llena mi alma y apenas

Deseo otra cosa que mirarte ya.

Música

Te tomo en mis brazos y empiezo a temblar

Mis ojos se cubren de lágrimas dulces

Tu espíritu llena mi alma y apenas

Deseo otra cosa que mirarte ya.

Al año siguiente...escribí otra canción...que nada tiene que ver con esta historia....y cuya letra va a continuación....Es una canción que habla de una negativa a traicionar mis principios y mi modo de ser...Y que aún esta vigente...

09/06/95 NO A.BARO

No sé porque habría de mentir

No sé porque habría de sentir

Algo diferente a lo que siento

No entiendo porque habría de vivir

No veo porque habría de decir

Algo diferente a lo que pienso

Sería transformarme en una sombra

Una falacia en la memoria

De una historia sin razón

Sería construir sobre madera

Un lecho para el fuego de la hoguera

Esperando que se enfríe el corazón

Tal vez, no se, tendría que reír

Tal vez, tal vez, debería partir

En mil pedazos mis creencias

No sé porque habría de mentir

No sé porque habría de fingir

Y dar día libre a mi conciencia

Sería transformarme en una sombra

Una falacia en la memoria

De una historia sin razón

Sería construir sobre madera

Un lecho para el fuego de la hoguera

Esperando que se enfríe el corazón

Música

No sé porque habría de mentir

No sé porque habría de decir

Algo diferente a lo que siento

Algo diferente a lo que pienso

No

NOTA-Ambas podéis oírlas en el reproductor soundclick,